Esta mañana nos levantábamos con la noticia sorpresa del día, un nuevo «accidente aéreo» en las costas españolas. Y claro, todo el mundo se ha asustado, como es lógico, de repente. Pero el suceso no ha ocurrido hoy. Se ha mantenido en secreto desde que sucedió el pasado 26 de Junio de 2018, frente a las costas de Rota, en Cádiz, España. Se mantuvo en absoluto secreto hasta que un buque americano de intervención rápida, el «USNS Arctic» (tercer barco en su clase de suministro de buques de apoyo de combate rápido y quinto barco de suministro en llevar el nombre de la región que rodea el Polo Norte) consiguió recuperar los restos del dron espía RQ-4 Global Hawk, evitando que cayese en manos de cualquier hipotético enemigo. Nos lo cuenta esta mañana el periódico «El Mundo». Por el momento se desconoce la misión que cumplía el Global Hawk y qué ruta estaba siguiendo.