Boeing despide al responsable del programa 737 MAX. La decisión se toma tras el grave incidente a bordo del vuelo de Alaska Airlines. El desprendimiento de un panel del fuselaje del B-737 MAX de Alaska Airlines ha sido la gota que ha colmado el vaso. Os lo cuento hoy en mi artículo.

Bienvenidos a bordo, amigos de los «Misterios Aéreos». Quizá hoy hablemos más de sentido común y de responsabilidad que de auténticos misterios en nuestros cielos. Una de las más importantes responsabilidades de una empresa de construcción aeronáutica es la SEGURIDAD, con mayúsculas. E imagino que la sigue la confianza de tus clientes. Y esa confianza en su mayor parte, el constructor aeronáutico estadounidense la ha perdido.

Y todo esto, obviamente, ha pasado factura y comienzan a rodar cabezas.

 

Cese fulminante del responsable del programa Boeing 737 MAX

 

El fabricante aeronáutico estadounidense Boeing anunció, el Miércoles 21 de Febrero de 2024, el cese fulminante del responsable del programa del Boeing B-737 MAX. Este cese inmediato sucede menos de 2 meses después del grave incidente sucedido a bordo de uno de los 737 MAX de Alaska Airlines. El incidente obligó a la compañía aérea a dejar en tierra, de forma temporal, 171 aviones del mismo modelo.

 

Ed Clark, Vicepresidente y Director General del Programa Boeing 737 MAX, ha sido destituido de manera fulminante hace una semana.

 

A través de un email a sus empleados, el Director General de Boeing Commercial Airplanes (BCA), Stanley Deal, anunció la salida de la empresa de Ed Clark, Vicepresidente y Director General del Programa Boeing B-737 MAX. Ed Clark, que dirigía además la usina de Renton, cerca de la sede histórica del grupo en Seattle, ha sido cesado también en este cargo tras 18 años de «dedicado servicio a nuestra empresa».

 

Katie Ringgold será el reemplazo de Ed Clark

 

El intercambio de responsables sucede tras el grave incidente del Boeing 737 MAX de Alaska Airlines, en pleno vuelo, el pasado 5 de Enero de 2024. Tras perder uno de los paneles que cubría una puerta del fuselaje que no se usaba, el avión tuvo que aterrizar de emergencia. 

Afortunadamente, no hubo heridos ni víctimas pero tras las inspecciones de seguridad por parte de la NSTB y FAA, hemos sabido que este incidente pudo terminar en un accidente catastrófico.

 

Ed Clark ocupaba su puesto desde Marzo de 2021, tras 20 meses de paralización del programa del MAX debido a los 2 accidentes mortales en 2018 y 2019.

 

Tras el incidente, la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) y la Administración Federal de Aviación (FAA), iniciaron una serie de investigaciones para determinar las causas. Descubrieron que a la puerta tapón del MAX de Alaska Airlines, le faltaban 4 pernos, los cuales pudieron no ser instalados desde la fabricación de la aeronave. 

Ed Clark ocupaba su puesto desde Marzo de 2021, tras 20 meses de paralización del programa del MAX debido a los 2 accidentes mortales en 2018 y 2019. El constructor americano nombró, además, a Elizabeth Lund como Vicepresidenta Senior de Calidad en la división de aviación comercial.

 

En 2019, el CEO fue cesado de forma fulminante

 

Cabe recordar que en 2019, Dennis Muilenburg, por entonces CEO de Boeing, fue expulsado del constructor estadounidense de forma irrevocable. Por aquel entonces, la empresa dio como motivo “la necesidad de un cambio de liderazgo para restaurar la confianza”. A partir de entonces, lo sustituyeron por el Presidente, David Calhoun, hasta que nuevamente encontraron reemplazo para su cargo.

 

En 2019, Dennis Muilenburg, CEO de Boeing, quedó apartado del constructor estadounidense de forma irrevocable a causa de la crisis de los fallos en la flota de Boeing.

 

La situación llegó a causa de la crisis que el fabricante estadounidense atravesaba desde que 2 de sus Boeing 737 MAX, sufriesen 2 accidente mortales. Murieron 346 personas. Los fallos provenían de errores en el modelo, de la fabricación y de alguno de sus sistemas como el famoso MCAS. 

 

Falta de comunicación entre directivos y empleados

 

Una comisión de expertos designada por la FAA, que inició sus investigaciones al inicio de 2023, considera que uno de los principales problemas es la falta de comunicación. Falta comunicación entre trabajadores y directivos en la empresa. El informe fue solicitado tras los accidentes de Boeing en 2018 y 2019.

Al parecer, se han unido 2 circunstancias. Mientras determinados empleados encontraban difícil reportar problemas (por temor a represalias), tampoco hallaban un sistema claro y eficiente para informar de esos problemas.

 

Boeing debe desarrollar un plan de acción integral para abordar “problemas sistémicos de control de calidad” en un plazo de 90 días, según la FAA.

 

Tras recibir el informe, Boeing está estudiando sus conclusiones. “Mientras continuamos nuestros esfuerzos integrales para mejorar nuestros programas de seguridad y calidad», afirman. Aprenderemos de sus hallazgos, pero aún queda trabajo por hacer”.

Seguiremos de cerca, como siempre, la actualidad del fabricante estadounidense. Hasta el próximo vuelo del misterio, amigos…