Aviones fantasma: Accidentes sucedidos que jamás ocurrieron. Muchos fueron testigos de catástrofes aéreas que jamás han sucedido. 20 de Octubre de 2011. Noche tranquila en Berkshire (UK). De repente, el pueblo se convierte en un auténtico infierno. Sin esperarlo, sobre las casas, desciende una aeronave con problemas a muy baja altitud rodeada de explosiones y de un fuerte olor a queroseno quemado. Segundos después, el aparato explota. El accidente nunca existió pero todos los vecinos lo vieron y lo vivieron. Os lo cuento en mi artículo de hoy.

Bienvenidos de nuevo a bordo, amigos de los «Misterios Aéreos». Estamos rozando Halloween en 2018, fecha en la que tanto nos encanta hablar de fantasmas y presencias extrañas. Nuestros cielos en el planeta siguen vivos cada día y nos dejan de nuevo historias llenas de intriga y de misterio, muchas de ellas sin explicación.

 

Accidentes aéreos de aviones fantasma

 

Ya he hablado muchas veces de fantasmas en el aire pero este tipo de testimonios e historias no dejan de sorprendernos con datos y testimonios nuevos. Hoy vamos a tocar un fenómeno que comprende a los accidentes aéreos de aviones fantasma. Viajamos a un posible escenario donde es común que varios testigos afirmen haber visto un avión a punto de estrellarse o incluso aeronaves en vuelo en llamas.

Según los informes, se escucha perfectamente el impacto del avión en algún punto del terreno cercano a los testigos que luego declaran sobre los hechos. Además de sentir el temblor en la tierra, debido al impacto de la aeronave contra el terreno cuando se produce el accidente, los testigos han informado ver humo y llamas. Otros afirman haber podido oler incluso el combustible derramado de los tanques de fuel de esos misteriosos aviones fantasma.

 

 

Diversas teorías para explicar los aviones fantasma

 

Existen muchas teorías que podrían dar respuestas a este tipo de apariciones inexplicables en nuestros cielos. Algunos expertos creen que se trata de vórtices o portales espacio – temporales que, de alguna manera, conectan 2 puntos ó 2 lugares. Estos portales permitirían la entrada de objetos o personas (aviones, barcos, etc…) a nuestro tiempo o a nuestro mundo.

Otros expertos en este tipo de investigaciones afirman que es la propia energía residual de algunos sucesos o acontecimientos (como accidentes o catástrofes). Desgracias ocurridas tiempo atrás y que, de alguna forma, dejan en el ambiente ese remanente de energía que han bautizado como energía residual. Lo que tenemos muy claro es que ocurren realmente y hay muchos testimonios que así lo verifican y demuestran.

 

Uno de los primeros registros de este tipo de avistamientos

 

Vamos a conocer uno de esos sucesos. Fue uno de los primeros registros que hubo sobre accidentes de “aviones fantasma”. Viajamos al 18 de Noviembre de 1955. Según los documentos de los archivos oficiales de este caso, hubo grupos numerosos de búsqueda y rescate peinando la región montañosa de Dark Hollow, Pennsylvania, EEUU.

Se procedió a la búsqueda de un avión que pensaban que se había accidentado, según las llamadas de testigos de la zona que lo afirmaban. La búsqueda se inició después de que Dale Murphy, Coordinador de la Defensa Civil del Condado de Cumberland (EEUU), informara haber recibido llamadas de, al menos, 10 miembros del Gobierno de Colombia. En las llamadas afirmaban haber escuchado y haber visto volando un avión con muchos problemas a unos 1.000 pies de altitud (300 metros).

 

 

Uno de los testigos dijo que vio una gran silueta tras una colina y que luego escuchó, de inmediato, algo parecido a una gran explosión. La explosión indicaba algún tipo de impacto contra el terreno de algún objeto. Sin embargo, los organismos y estamentos del control aéreo del lugar, no informaron nunca de ningún avión perdido o  en problemas. Sencillamente, no tenían constancia de ningún tipo de emergencia de ninguna aeronave volando en aquel momento.

 

Misteriosas bengalas en el aire

 

Inmediatamente después, aviones de búsqueda y rescate fueron enviados a la zona señalada por los testigos. Los rescatistas partieron desde la base militar de las Fuerzas Aéreas de Westover, Massachusetts (EEUU). Despegaron de emergencia para ayudar a los equipos de tierra en la búsqueda de los restos de la supuesta aeronave estrellada. Se solicitó a las tripulaciones de los aviones de búsqueda y rescate que investigaran un profundo barranco cercano.

Tras informarse de la misteriosa aparición de aquella aeronave fantasma en problemas, en el cielo se divisaron 2 bengalas lanzadas en aquel lugar. La búsqueda fue realizada por la Fuerza Aérea de EEUU, por la Patrulla Aérea Civil de EEUU y por unas 500 personas a pie sobre el terreno. Entre los que buscaban a pie había bomberos, policías, trabajadores de Defensa Civil y voluntarios de zonas cercanas.

La búsqueda concluyó sin éxito y sin ningún rastro del supuesto avión accidentado. Pero varios días después de aquella búsqueda, se volvió a ver exactamente el mismo tipo de avistamiento de aquella supuesta aeronave fantasma.

 

 

2 días después del caso de Dark Hollow, sucede lo mismo

 

En concreto, el 20 de Noviembre de 1955, 2 días después del suceso que he narrado, se notificaron de nuevo bengalas amarillas en el aire. Los artefactos luminosos se divisaron a las 01:30 horas de la noche. A las 18:00 horas, llegaron rápidamente de nuevo los equipos de rescate a la zona donde se produjo el nuevo avistamiento. Fueron totalmente incapaces de ver nada anormal e inusual en aquel lugar.

De nuevo se repitió el caso. No existía ningún tipo de resto en el lugar, derivado de un posible accidente aéreo. No había ningún superviviente de aquella posible aeronave accidentada ni prueba de ningún objeto que impactase contra el terreno. El 22 de Noviembre de 1955, 2 día después de este avistamiento de bengalas, se suspendieron definitivamente todas las labores de búsqueda. Aquel supuesto “avión fantasma” se convirtió en una leyenda del lugar.

 

3 testigos afirmaron ver personas saltar desde un avión fantasma

 

Curiosamente, un año después, en Febrero de 1956, 3 mujeres dijeron haber visto en la región de Ovando (Montana, EEUU) una estela de humo procedente de un avión en vuelo. Afirmaron que pudieron llegar a ver muy claramente como algunas personas saltaban en paracaídas desde aquella aeronave.

 

 

Las testigos informaron a las autoridades locales del claro accidente de avión que habían presenciado. Habían conseguido ver saltar a varios supervivientes en paracaídas del avión en problemas. El Sheriff de la zona, Ed Barrow, junto a un Diputado y, a pesar de las bajas temperaturas de aquella zona, montaron una operación de búsqueda y rescate.

Lo hicieron por tierra y por aire junto con más medios que fueron llegando para colaborar. Nunca llegaron a encontrar absolutamente nada, ni restos de una aeronave ni supervivientes.

 

Ovando, Montana, zona caliente de avistamientos de aviones fantasma

 

Tras el avistamiento de aquellas 3 mujeres en 1956, 2 días después, se produjo otro episodio similar. Un testigo bastante joven, afirmó haber visto otro «avión fantasma» cerca de Ovando, Montana, EEUU. El testigo informó a las autoridades locales de una explosión en una colina cerca de su casa. Este testigo describió aquel suceso como una gran explosión seguida de muchísimas llamas.

En este caso, lo más sorprendente es la hora y ubicación exacta del incendi. Coincidían a la perfección con el caso anterior. Milimétricamente y, en el mismo lugar, todo coincidía con el testimonio dado anteriormente por las 3 mujeres, testigos presenciales, de aquella aparición del misterioso avión fantasma.

 

 

Trabajadores de organismos y administraciones locales, autoridades civiles y autoridades aéreas, informaron que en ningún momento hubo ningún tipo ni clase de avión militar en la zona. No hubo ningún avión comercial civil o privado desaparecido en aquella zona ni aviso de emergencia en vuelo de ninguna aeronave ni ningún SOS emitido por radio. 

El 18 de Febrero de 1956, Carl Schirmer, Coordinador del Equipo de Búsqueda y Rescate de Montana (EEUU), afirmó que definitivamente no podían resolver el misterio. No había respuestas para este caso ni para las apariciones presenciadas por los distintos testigos. Sencillamente no había respuesta que aclarase nada.

 

La prensa termina haciéndose eco del caso

 

Varios años después, en 1976, un medio de prensa estadounidense, publicó la declaración en rueda de prensa de un miembro de un cuerpo de búsqueda y rescate. En ella, afirmó lo siguiente: “En el Condado de Butler, Ohio, las autoridades interrumpimos ayer por la tarde la búsqueda de un supuesto avión accidentado. Esa aeronave, al parecer, se habría estrellado en el municipio de Reilly, cerca de Indian Creek, en la noche del miércoles.”

Este suceso comenzó cuando un operador de radio, aficionado, escuchó una llamada de auxilio procedente de un avión en vuelo. El aparato, aparentemente, cubría la ruta entre Oxford y Cincinnati sobre las 23:00 horas de aquella noche.

 

 

A esa misma hora, unos cazadores de aquella zona precisamente, afirmaron con total rotundidad haber visto un destello blanco en el cielo. Sucedió justamente sobre los árboles que tenían delante. Luego escucharon un fuerte impacto contra el terreno, seguido de una multitud de gritos desesperados de personas. 

 

Controladores aéreos que nunca detectaron nada y nieblas extrañas

 

Ningún aeropuerto de la región de Hamilton y del Condado de Butler (los más cercanos) tenía constancia de ninguna aeronave volando a esa hora en aquella zona. No había tráficos notificados en ruta ni aeronaves comerciales que cubrieran aquel trayecto en esa noche.

Las autoridades buscaron por tierra y aire el supuesto avión accidentado y posibles supervivientes. Sin embargo, tuvieron que detener las labores de búsqueda cuando una extraña niebla totalmente anómala en aquel lugar, les impidió continuar de forma repentina.

 

 

Al día siguiente, por la mañana, continuaron la búsqueda de los restos de la aeronave pero, desgraciadamente, sin ningún tipo de éxito. Nadie pudo encontrar ningún avión accidentado. No hallaron ningún resto de fuselaje ni ningún cuerpo de ningún posible pasajero. Otro capítulo de un avión fantasma que quedaba registrado sin ninguna solución.

 

El caso de Westbrook, Connecticut, en 1997

 

Volamos a tiempos más actuales; ponemos rumbo a 1997. Los habitantes del Condado de Westbrook (Connecticut, EEUU), se vieron una vez más sorprendidos de repente la mañana de un miércoles 15 de Enero de 1997. Un avión de un solo motor había desaparecido misteriosamente sobre aguas de Long Island.

Participó en la búsqueda y rescate la Guardia Costera de EEUU, el Departamento de Protección Ambiental de Westbrook, 2 helicópteros de rescate y Cuerpos de Bomberos de Westbrook, Old Saybrook, Madison, y Clinton. Se unieron a la búsqueda varias patrullas marinas y varias embarcaciones privadas. Buscaron y rastrearon en unos 100 km cuadrados, aproximadamente. Varios testigos alertaron de que habían visto un avión accidentado y caído en el agua en aquella zona.

Daniel Bowes fue uno de los testigos presenciales de aquel caso. Bowes testificó que estaba tomando un café sobre las 07:30 horas de la mañana en West Beach, Island Road, cuando de repente observó un avión volando a muy baja altura sobre el agua. Relató que el avión cayó en picado al agua y se estrelló. El testigo confirmó que él lo vio todo perfectamente.

 

 

Pero como en los demás casos anteriormente relatados, de “aviones fantasma”, ningún aeropuerto de las zonas cercanas informó de ningún avión perdido ni desparecido. No había avisos de ninguna emergencia en vuelo. A las 16:00 horas, la Guardia Costera suspendió la búsqueda oficialmente. No se encontró nunca ningún rastro de aquella supuesta aeronave accidentada ni cuerpos ni fuselaje ni un solo rastro de combustible.

 

El caso de Berkshire, en Inglaterra, Reino Unido en 2011

 

Y en Europa, no somos menos afortunados en las vivencias de casos de avistamientos de «aviones fantasma». Noche del 20 de Octubre de 2011. Condado de Berkshire (Inglaterra, UK). Berkshire es un lugar tranquilo y pacífico; el típico lugar británico, diría yo. Esa noche de Octubre de 2011, sin embargo, la calma se rompió.

El suceso alertó a todos sus vecinos, en medio de una tranquila noche. Aquella noche, algunos testigos (vecinos del lugar), informaron a las autoridades de que habían escuchado un fuerte sonido totalmente ensordecedor, sobre sus casas, procedente del cielo. Según algunos testigos, el sonido era como un ataque aéreo de la II Guerra Mundial.

Incluso varios testigos afirmaron haber visto un auténtico avión de pasajeros en un vuelo rasante sobre Berkshire. Otros habitantes describieron la aeronave como un avión más pequeño y ligero. Pero en cualquier caso, todos los testigos parecían coincidir en que el avión parecía estar en peligro y volaba muy, muy bajo. Y todos los testigos coincidieron en que se podía apreciar en el ambiente un fuerte y extraño olor a petróleo quemado.

 

Las autoridades de Aviación Civil, de nuevo sin respuestas

 

De nuevo, y como siempre sucedía en este tipo de casos, las autoridades de Aviación Civil del Reino Unido, no tenían ningún aviso de ninguna aeronave en emergencia. No existía, aquella noche, ningún aviso de ninguna aeronave, civil o militar, en problemas alrededor de aquella zona.  En concreto, el propio portavoz de Aviación Civil del Reino Unido, Nic Stevenson, así lo declaró:

“Si algo se encontraba volando tan bajo lejos de un aeropuerto sería una situación inusual y tendríamos que haber tenido constancia. El plan de información obligatoria de sucesos abarca todo, desde si un miembro de la tripulación de cabina se rompe un hueso en su pie hasta si existen problemas en el tren de aterrizaje de un avión. Cubrimos una gran cantidad de casos…”.

 

 

Es obvio que aquella noche ningún avión se estrelló en Berkshire. Si el avión era tan grande, como para que algunas personas lo vieran, entonces tendría que haber dejado una inmensa huella de destrucción en el terreno. Las propias autoridades, tanto civiles como militares, se quedaron realmente confundidas en cuanto a lo sucedido. Sobre el caso hubo vagas explicaciones.

En resumen, según estos casos registrados de «aviones fantasma», estamos ante unos casos muy misteriosos y enigmáticos relacionados con las catástrofes aéreas. Los casos no tienen explicación racional posible. Espero que al menos, os haya quedado cara de misterio a todos con esta nueva entrega. Hasta el próximo vuelo del misterio, amigos…