Proyecto Blue Beam: El proyecto de la iluminación divina. Tras los últimos avistamientos OVNI, resurge la tesis de un proyecto ultra-secreto. Los derribos en la última semana, por parte de las Fuerzas Aéreas de EEUU, de varios Objetos Voladores No Identificados (OVNIS) han resucitado viejos proyectos secretos. Os lo cuento hoy en mi artículo.

Bienvenidos a bordo, amigos de los «Misterios Aéreos». Hemos sido testigos de varios derribos de Objetos Voladores No Identificados en los últimos días sobre el Lago Hurón (región de los Grandes Lagos), en la frontera entre EEUU y Canadá y sobre Alaska. A raíz de estos hechos, comenzaron a circular de nuevo diversas teorías de la conspiración relacionadas con proyectos ultra-secretos, que nacen en 1994 y que se propagan desde entonces. Todo relacionado con el oscuro proyecto que nace de un poder mundial común. Se ha bautizado como “Proyecto Blue Beam«.

 

La segunda fase del «Proyecto Blue Beam» quizá, según los más conspiranoicos, podría estar dándose con la actualidad que estamos viviendo del derribo de OVNIS sobre EEUU y Canadá.

 

Hasta donde sabemos, y así lo ha hecho saber el propio Pentágono, el OVNI del domingo pasado fue el tercer objeto volador abatido por un misil de un caza americano en 3 días. Sucedió tras interceptarse otro en aguas de Alaska y otro diferente derribado en la región canadiense del Yukón (frontera con Alaska), el sábado pasado.

 

«Blue Beam», el proyecto de la Iluminación Divina

 

El “Proyecto Blue Beam” también ha sido bautizado como el “Proyecto de la Iluminación Divina”. Se trata de una teoría conspirativa creada y propuesta por un periodista de nombre Serge Monast. Fue un ensayista y teórico canadiense que describe este tipo de sucesos ufológicos y divinos como producciones de parusías (Advenimiento Glorioso de Jesucristo al final de los tiempos). Éstas se han ideado y elaborado en organismos de poder como son el Gobierno de EEUU o la propia NASA.

La parusía, según la religión cristiana, es el mayor acontecimiento esperado al final de la historia o al final de los tiempos: la segunda venida de Cristo a la Tierra. También se le denomina con la palabra “Maranata” (una transcripción griega de una expresión de origen arameo), que significa «Cristo Viene» o “El Señor Viene”. En la Biblia, este hecho se menciona en diversas ocasiones, como por ejemplo en los cuatro Evangelios.

 

El “Proyecto Blue Beam” también ha sido bautizado como el “Proyecto de la Iluminación Divina”. Tiene como objetivo el confundir a la conciencia humana sobre las creencias más elementales como pueden ser las de la religión.

 

Para los estudiosos del “Proyecto Blue Beam” y de sus teorías, la publicación en la prensa mundial de los derribos de varios OVNIS en la última semana tiene como objetivo el confundir a la conciencia humana sobre las creencias más elementales como pueden ser las de la religión. Y con ello, tratar de establecer una nueva normalidad o “Nuevo Orden Mundial”.

¿De qué manera se podría engañar a la conciencia humana a nivel mundial en el ámbito de la religión? Muy sencillo, por ejemplo con una supuesta segunda llegada de Cristo a la Tierra camuflando a un verdadero Anticristo a través de simulaciones holográficas en 3D.

 

Monast, que denunció «Blue Beam», muere de paro cardiaco

 

El periodista Monast, autor de esta tremenda teoría, declaró lo mismo durante muchos años en torno a estas hipótesis. Y denunció siempre ser perseguido por las autoridades debido a que hizo pública mucha información clasificada.

Los partidarios que comparten la teoría de Monast y de su coautor, han denunciado que ambos fueron asesinados. Los dos murieron de sendos paros cardiacos en 1996. Curiosamente, ninguno de los dos contaba con antecedentes por problemas de cardiopatía. Así mismo, esos mismos seguidores de las tesis de Monast, mantienen también que el Gobierno de Canadá fue el responsable de la desaparición de su hija y de numerosas descalificaciones públicas que se hicieron sobre la figura de Monast.

 

La teoría conspirativa de «Blue Beam» fue creada y propuesta por un periodista de nombre Serge Monast. Fue un ensayista y teórico canadiense que describe este tipo de sucesos ufológicos y divinos como producciones de parusías

 

Serge Monast mantenía que la idea del “Proyecto Blue Beam” se habría querido implantar ya desde 1983 pero que al final esta fecha se pospuso a los años 1995-1996. También declaró públicamente su idea de que este proyecto secreto terminaría de implantarse en el año 2000.

Veamos ahora los cuatro pasos que Serge Monast vaticinó que el “Proyecto Blue Beam” necesitaba dar para implantarse con éxito.

 

Primera fase: Modificar nuestro conocimiento arqueológico actual

 

La primera fase del “Proyecto Blue Beam” consistiría en modificar nuestro conocimiento arqueológico actual. ¿De qué manera podrían conseguir eso? Por ejemplo, a través de terremotos y de otros desastres naturales, ocasionados siempre de manera artificial. En esos lugares donde ocurrieran estos fenómenos artificiales, se hallarían tras la desgracia, supuestos nuevos descubrimientos arqueológicos.

 

El show de hologramas en el cielo lo estaríamos viviendo en estos momentos con la crisis de los globos espía y de los avistamientos de Objetos Voladores No Identificados.

 

Esto, a su vez, ocasionaría que las personas revisaran las bases de sus religiones, haciendo creer a muchos que toda doctrina religiosa se ha interpretado de manera errónea a lo largo de la historia.

 

Segunda Fase: Un auténtico show de hologramas en el cielo

 

La segunda fase de este proyecto quizá, según los más conspiranoicos, podría estar dándose con la actualidad que estamos viviendo del derribo de OVNIS sobre EEUU y Canadá. Se trataría de la recreación, mediante hologramas en 3D en el cielo a lo largo del mundo entero, del rostro de Dios según cada etnia y cada religión. Digamos que, según la Fe de cada zona de planeta.

Este tipo de recreaciones se conseguiría mediante proyecciones láser en diferentes partes del mundo con una imagen diferente de Dios según cada religión. El rostro de Jesús, el rostro de Alá, la imagen de Buda, etc…

Esta supuesta imagen de Dios nos hablaría en todos los idiomas y además se proclamaría ante todos los países del mundo imponiéndonos una sola religión, un solo tipo de moneda y una sola ideología. Así, de esta forma, crearían el “Nuevo Orden Mundial”.

 

Después de esta falsa invasión, habría que hacer creer a todo Cristiano de la Tierra que está ocurriendo la Gran Tribulación de la que habla la Biblia. Bastaría con una simple puesta en escena, simulando una intervención divina que se llevaría y salvaría a las buenas personas de esa invasión y ataque extraterrestre.

 

En 1991, se ideó un plan para probar la posibilidad de llevar a cabo este tipo de recreaciones intentando proyectar el rostro de Alá sobre Bagdad. Así, EEUU instaba a los iraquíes a derrocar al dictador Saddam Hussein.

Y este mismo espectáculo de avistamientos en el cielo lo estaríamos viviendo en estos momentos con la crisis de los globos espía y de los avistamientos de Objetos Voladores No Identificados.

 

Tercera Fase: La comunicación telepática

 

La tercera fase del “Proyecto Blue Beam” se basa en las ondas de frecuencia extremadamente baja. Son la VLF (Very Low Frequency, Frecuencia Muy Baja) y la LF (Low Frequency, Baja Frecuencia). Este tipo de ondas de frecuencia serían capaces de localizar a las personas a través encéfalos.

Y de esta manera, podrían saber en qué piensa cada persona y así modificar sus pensamientos al antojo de cada Gobierno. Serían capaces de poder hablar directamente a la mente de cada individuo. Y también conseguir que se escuchen los pensamientos de cada persona entre unos y otros.

 

El objetivo de «Blue Beam» sería empujar a cada país a usar su propia capacidad nuclear para responder a esta invasión alienígena. De esta manera, cada nación del planeta quedaría totalmente indefensa ante el conjunto de Naciones Unidas tras ese falto ataque y esa falsa invasión extraterrestre.

 

Las ondas de frecuencia tan bajas serían generadas por satélites y alimentadas por ordenadores. A su vez, guardarán en sus bases de datos toda la información sobre cada individuo en referencia a su cultura, ideología, política, costumbres o idiomas. Estas ondas se entrelazarían con los procesos naturales del pensamiento para así formar lo que los teóricos de conspiración denominan «charla artificial».

 

Cuarta Fase: Manifestaciones Sobrenaturales

 

La cuarta fase de este proyecto ultra-secreto consistiría en convencer a toda la sociedad de que estamos en la antesala de una invasión extraterrestre. El objetivo sería empujar a cada país a usar su propia capacidad nuclear para responder a esta invasión alienígena. Así, cada nación del planeta quedaría totalmente indefensa ante el conjunto de Naciones Unidas tras el falto ataque y la falsa invasión extraterrestre.

Tras la falsa invasión, habría que hacer creer a todo Cristiano de la Tierra que está ocurriendo la Gran Tribulación de la que habla la Biblia. Bastaría con una simple puesta en escena. Simulando una intervención divina que se llevaría y salvaría a las buenas personas del ataque extraterrestre. De esa manera limpiarían oposición al “Nuevo Orden Mundial”.

 

Monast mantenía que “Blue Beam” se habría querido implantar ya desde 1983 pero al final se pospuso a 1995-1996. También declaró públicamente su idea de que este proyecto secreto terminaría de implantarse en el 2000.

 

Y por último, asistiríamos a la mezcla de fuerzas electrónicas y sobrenaturales. Esas ondas VLF permitirían a las fuerzas sobrenaturales colarse en casa de todas las personas. Lo harían a través de la fibra óptica, de cables coaxiales o líneas telefónicas. Así penetrarían en todo equipo electrónico que posea un microchip especial instalado y que todos podemos tener en nuestras casas.

El objetivo sería simular o materializar presencias de fantasmas, espectros y sucesos paranormales. Por ejemplo, los “poltergeist”, en los hogares. Y así llevar a la gente al borde de la desesperación, dejándoles como única salvación el adoptar la ideología del “Nuevo Orden Mundial”.

 

La conexión española de «Blue Beam»

 

Finalmente, el objetivo de todo esto es establecer un solo líder mundial para un solo gobierno mundial, totalmente centralizado. Tal y como denunció Serge Monast en su tesis de cómo funciona el “Nuevo Orden Mundial”.

Los estudiosos de «Blue Beam» también afirman que un espía internacional, de origen español y alta clasificación, está implicado en este proyecto. Su nombre sería Iván Legarrea y es el encargado de actualizar hoy en día este proyecto. Incluso habría usado el «Proyecto Blue Beam»  para infiltrarse en grupos de terrorismo y guerrilla.

 

Hasta donde sabemos, y así lo ha hecho saber el propio Pentágono, el OVNI del domingo pasado fue el tercer objeto volador abatido por un misil de un caza americano en 3 días. Sucedió tras interceptarse otro en aguas de Alaska y otro diferente derribado en la región canadiense del Yukón (frontera con Alaska), el sábado pasado.

 

De hecho lo habría logrado en organizaciones terroristas como el «ISIS» en África y Oriente Medio. Incluso en otras como «Al Shabaab» en Somalia, «Boko Haram» en Nigeria o «Al Qaeda» en Arabia. Dicen que es conocido por conocido por usar alias como «Antonio López», «Toledovsky» o «Jason». Y que actualmente sigue en servicio.

Toda esta biografía de este auténtico espía está recogida se encuentra en un libro escrito por Vladimir Ktchinesti titulado «Los hombres sin cara». Libro prohibido, por cierto, en la Rusia de la época de la KGB.

Seguiremos, como siempre, muy cerca en los próximos días, cualquier información que surja sobre el fenómeno OVNI o sobre «Blue Beam». Hasta el próximo vuelo del misterio, amigos…