Bienvenidos una vez más a bordo, amigos de los Misterios Aéreos. Hay muchas historias que, hoy en día, apenas conocemos en relación a hechos que sucedieron alrededor de aviones involucrados en accidentes o tragedias aéreas. Hoy quiero volar, junto a todos vosotros y en este nuevo capítulo de los enigmas aéreos, con rumbo al continente africano, a los cielos de Somalia, un lugar de nuestro planeta sacudido siempre por guerras y conflictos, sobre todo por mucha violencia. Os traigo en esta ocasión un par de casos llenos de una alta dosis de polémica y encubrimiento en torno al derribo de dos aeronaves bielorrusas, casos jamás esclarecidos al 100% ni su autoría. 

Las autoridades de Bielorrusia informaron en 2007 que dos aviones fueron derribados en Somalia, uno en fase de despegue y el otro en la fase de aproximación y aterrizaje, pero el gobierno de Somalia mantiene que ambos fueron desafortunados y sencillos accidentes. Se trata del caso de dos aviones modelo Ilyushin Il-76, que cayeron en el Aeropuerto Internacional de Mogadiscio en el año 2007.

 

Estando el avión a 120 metros del suelo para tomar tierra, fue súbitamente alcanzado por fuego enemigo de lanzagranadas. El avión, a continuación, se empotró contra la pista en su intento de aterrizar pero llegando a alcanzarla, aunque se incendió de inmediato.

El 23 de Marzo de 2007, un Ilyushin Il-76 TD de la empresa de carga aérea “Trans Avia Export Airlines”, con sede en Bielorrusia, se disponía a despegar con destino al Aeropuerto Nacional de Minsk, en Bielorrusia, con escala para repostar combustible en el Aeropuerto Internacional de Djibouti-Ambouli, en República de Djibouti. El avión era un cuatrimotor a reacción con matrícula EW-78849. Se halla listo para salida y en la cabina de mando está la siguiente tripulación:

Comandante Igor Leonidovich Vashkevich.
Copiloto Aleksandr Viktorovich Gomanykov.
Navegante Gennady Aleksandrovich Trashkov.
Radiotelefonista Oleg Viktorovich Kanunnikov.
Ingeniero de Vuelo Ivan Ivanovich Gab.
Asistente de carga en jefe Aleksandr Ivanovich Zernin.
Asistente de carga regular Igor Mijáilovich Gres.

Llevaban como pasajeros a los ingenieros y técnicos aeronáuticos: Mikhail Ivanovich Baglov, Oleg Yevgeniushovich Bondaronok, Dmitry Sergeevich Nosnikov y Artem Borisovich Sychugov. Todos eran bielorrusos y el hecho de estar en Mogadiscio no les hacía la menor gracia ya que se libraban crudos combates en la ciudad dentro de la Guerra Civil en Somalia.

 

Ilyushin 76 alcanzado por disparos de Al Shabab en 2007. Aeropuerto Aden Abdullen de Mogadiscio, Somalia.

 

La razón de que estuvieran los bielorrusos allí obedece al siguiente motivo. El día 9 de Marzo de 2007, 14 días atrás, otro avión del mismo tipo Il-76 TD de Trans Avia Export Airlines que tenía de matrícula la EW-78826, estaba realizando una aproximación y aterrizaje a ese mismo aeropuerto transportando equipos para ayudar a los somalíes, procedente del célebre Aeropuerto de Entebbe en Uganda; estando el avión a 120 metros del suelo para tomar tierra, fue súbitamente alcanzado por fuego enemigo de lanzagranadas. El avión, a continuación, se empotró contra la pista en su intento de aterrizar pero consiguió alcanzarla, aunque se incendió de inmediato. Lo más ridículo del suceso es que el único camión de bomberos del aeropuerto que pudo haber sofocado el incendio no salió hasta una hora después del accidente. ¿Sabéis por qué? No tenía gasolina para moverse. El avión acabó por consumirse bajo el fuego pero afortunadamente los 15 ocupantes entre tripulantes y pasajeros sobrevivieron para contarlo.

 

El día 9 de Marzo de 2007, otro avión del mismo tipo Il-76 TD de Trans Avia Export Airlines que tenía de matrícula la EW-78826 fue atacado durante su aterrizaje. Lo más ridículo del suceso es que el único camión de bomberos del aeropuerto no salió hasta 1 hora después del accidente. No tenía gasolina para moverse. El avión acabó por consumirse bajo el fuego.

 

Los pilotos fueron interrogados para saber qué ocasionó el accidente. Lo que dijeron fue muy revelador: habían sido alcanzados por fuego de lanzagranadas disparado desde un barco cercano a la pista de aterrizaje ya que la aproximación final se hacía desde el Océano Índico. Sin embargo, las autoridades somalíes se apuraron en asegurar que todo fue un caso de fallos mecánicos y/o errores de los pilotos. Así, los directivos de Trans Avia Export Airlines decidieron enviar otro avión del mismo tipo con otra tripulación para hacerse cargo de las posibles reparaciones del aparato dañado y, en caso negativo, recuperar piezas clave que pudieran ser reutilizadas en otros aviones IL-76 de la empresa.

Tras el encargo de la empresa, el avión está listo para despegue y empieza a recorrer la pista asignada, impulsado por sus motores Soloviev D-30KP-2 rugiendo a tope. Levanta el morro, alza el vuelo, despegando con rumbo al Océano Índico para luego hacer un viraje y seguir el vector de rumbo para Djibouti. Alcanzan una altitud de vuelo de 3000 metros (9000 pies) cuando de repente… algo sucede; el Comandante Vashkevich declara MAYDAY por radio indicando que deben regresar a la pista por daños en el motor nº 2. Los controladores aéreos somalíes lo autorizan y cuando los pilotos intentan virar hacia la pista, el ala izquierda del avión se desprende totalmente del aparato y se precipitan sin remedio. Los de abordo debieron sufrir segundos eternos de descarnado terror al ver que no volaban a ninguna otra parte más que al suelo. Sobrevolaron muy bajos la zona de playas y se estrellaron contra el suelo.

 

Los controladores aéreos somalíes lo autorizan y cuando los pilotos intentan virar hacia la pista, el ala izquierda del avión se desprende totalmente del aparato y se precipitan sin remedio. Los de abordo debieron sufrir segundos eternos de descarnado terror …

 

Se hallaron 10 cuerpos salvajemente destrozados y entre ellos a una persona que está viva. Uno de los ocupantes, desorientado y shock, no resistió sus heridas y falleció unas horas después del accidente. Así comenzaron los rumores sobre el suceso. Varios testigos mencionaron que el avión había sido alcanzado por cohetes; uno decía esto: -“Yo lo vi, el avión volaba muy bajo, un cohete los alcanzó y cayeron…”

Otros testigos mencionaron que era posible que en la zona de despegue hubiera algún bote con terroristas armados con lanzagranadas y que éstos las usaran contra el avión bielorruso. Otras versiones apuntan al hecho de que cerca del aeropuerto existe un mercado y que desde allí unos milicianos abrieran fuego en contra del IL-76. Eso no fue todo, esas mismas versiones coincidían respecto a lo que había pasado el día 9 de Marzo con el otro IL-76. Se abría delante de los investigadores un caso de doble derribo deliberado cometido desde tierra.

 

Otras versiones apuntan al hecho de que cerca del aeropuerto existe un mercado y que desde allí unos milicianos abrieran fuego contra el IL-76.

 

Mientras más versiones salían a la luz, más se esforzaban los somalíes en tratar de demostrar que todo derivó en dos desafortunados accidentes aéreos de la misma empresa con el mismo tipo de aeronave. Algo trataban de ocultar y esto se hacía muy sospechoso, tanto que las autoridades bielorrusas iniciaron su propia investigación por medio del Ministerio de Transportes Bielorruso para dar con las causas de esta tragedia y del derribo previo de dos semanas antes.

Surgieron grupos de extremistas islámicos que desde sitios web se adjudicaban estos derribos, pero estos grupos nunca se identificaron; quizá sea verdad o quizá se estaban columpiando para tener mayor publicidad. Se repatriaron los cuerpos de las víctimas a Bielorrusia para que se les diera sepultura y las investigaciones de alguna manera se empantanaron, tanto el derribo del día 9 como el del 23 de Marzo de 2007 que quedaron, al menos para los somalíes, en casos de accidentes aéreos simples y llanos. Para los bielorrusos sin duda fue un doble caso de encubrimiento criminal. Trans Avia Export Airlines y todas las aerolíneas de Bielorrusia tomaron la determinación de jamás volver a volar a Somalia por el peligro que representa para su seguridad y la de sus aeronaves.

 

Restos de un viejo Ilyushin 76 ruso accidentado en el año 2012 en las inmediaciones del Aeropuerto de Mogadiscio, en Somalia.

 

Y así, amigos de los Misterios Aéreos, terminamos con este caso que hasta la fecha de hoy no se sabe con certeza qué pasó o quiénes fueron los autores de estos ataques, causa que fue la más probable para que los dos aviones bielorrusos se vinieran al suelo sin remedio. Hasta nuestro próximo destino, o más bien, hasta nuestro próximo enigma aéreo…